-.-
Las Comunidades Energéticas constituyen una forma de democratizar el acceso al servicio de energía eléctrica en el país.
El Ministerio de Minas y Energía, y sus entidades adscritas, lideran este programa del Gobierno del Cambio, que busca llevar soluciones energéticas a las regiones más apartadas y las comunidades más vulnerables. Ya van 2.835 postulaciones.
Bogotá, D.C., 30 de diciembre de 2023
Las Comunidades Energéticas son grupos organizados de usuarios que se asocian para generar, comercializar y/o usufructuar eficientemente la energía a través de fuentes no convencionales renovables, según lo previsto en el artículo 235 del Plan Nacional de Desarrollo 2022 – 2026 (Ley 2294 de 2022).
Estas formas de asociatividad entre usuarios y potenciales usuarios de servicios energéticos que cooperan entre sí, se rigen por un contrato de derecho privado, para el uso de fuentes no convencionales de energía renovable, combustibles renovables y recursos energéticos distribuidos.
Entre los objetivos que tiene esta estrategia están:
– Mejorar la cobertura del servicio de energía y garantizar el acceso de poblaciones vulnerables.
– Aumentar la eficiencia energética evitando pérdidas de energía.
– Democratizar la energía a partir de la participación de los usuarios.
– Descentralizar la generación, el almacenamiento y el consumo de energía.
– Descarbonizar la economía.
– Desarrollar la economía local y territorial en el marco del desarrollo sostenible.
– Aumentar la confiabilidad del sistema bajo gestión comunitaria.
– Ofrecer condiciones económicas asequibles al servicio de energía para las comunidades.
– Fomentar modelos de desarrollo energéticos respetuosos con el medio ambiente.
– Generar procesos de aprovechamiento eficiente y socioambientalmente responsable de los potenciales energéticos renovables regionales.
Se trata, entonces, del principal instrumento del Gobierno del Cambio para impulsar la Transición Energética Justa en Colombia, uno de los pilares del tránsito hacia una economía descarbonizada que propone el presidente Gustavo Petro para no depender de los combustibles fósiles.
Con la implementación de estas comunidades, reglamentadas en su constitución y operación a través del Decreto 2236 del 22 de diciembre de 2023, se busca garantizar el derecho de la población más vulnerable del país al goce del suministro domiciliario de energía eléctrica.
La estrategia fue presentada oficialmente por el Gobierno del Cambio en la población de Uribia, La Guajira, a finales de noviembre pasado, y ya tiene 2.835 solicitudes de comunidades postuladas en todo el país.
Solo en La Guajira se espera que 2024 comience con 123 comunidades energéticas en diferentes poblaciones, pues el propósito es aprovechar la energía eólica y solar de esta región del país, considerada una de las potencialidades más grandes del planeta en esa materia.
A la estrategia puede postularse cualquier asociación, consejo comunitario o junta de acción comunal que quiera llevar esta solución a su comunidad para el aprovechamiento de fuentes no convencionales de energía renovable como pequeñas plantas hidroeléctricas, energía eólica y energía geotérmica, entre otras.
La postulación a este programa se hace de forma directa, sin intermediarios, y tanto el Ipse (Instituto de Planificación y Soluciones Energéticas) y el Fenoge (Fondo de Energías No Convencionales y Gestión Eficiente de la Energía) brindan el acompañamiento de la mano del Ministerio de Minas y Energía.
De esta forma, las comunidades no solo podrán generar su propia energía y usufructuarla en beneficio propio, sino comercializar los excedentes y democratizar el acceso a este recurso natural para abaratar costos, especialmente para sectores de menores ingresos económicos.