Colombia amaneció siendo un país más digno’, dice la senadora Esmeralda Hernández, Congresista del PH. autora del proyecto de la ley que prohíbe las corridas de toros,

Esmeralda Hernández, quien es cuñada de Camilo Romero, es conocida por su activismo por los animales y fue la autora del proyecto que prohíbe esta práctica

El Congreso de la República tomó una decisión que, aunque genera controversia y divide a la población, es histórica para el país. Fueron prohibidas las corridas de toros. Una lucha que venían dando los animalistas desde hace décadas y que, a 

El ponente del proyecto en su cuarto y último debate que tuvo lugar en la plenaria de la Cámara de Representantes fue el risaraldense Alejandro García, quien milita en la Alianza Verde. Sin embargo, la verdadera cabeza detrás de la iniciativa fue la administradora pública bogotana Esmeralda Hernández, quien llegó por primera vez al Senado en 2022 como parte de la lista cerrada del Pacto Histórico.

Justamente, la defensa de los animales es la causa que más ha caracterizado la carrera de Hernández, quien ha hecho parte de la Asociación Animalista de Bogotá. Sin embargo, no fue esto lo que le permitió dar el gran salto en la política, sino el respaldo del hoy Embajador de Colombia en Argentina, Camilo Romero, uno de los referentes de los verdes, el primer Partido al que se acercó la senadora.

Esa cercanía con el exgobernador de Nariño no es casualidad, puesto que ella está casada con Pablo Romero, el hermano de Camilo. De hecho, el primer gran cargo al que llegó la bogotana fue a coordinar la Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) del nacido en Ipiales cuando este fue senador entre 2010 y 2014. Años más tarde, con Claudia López en la Alcaldía, sería alcaldesa local de Teusquillo, pero solo alcanzó a estar un año antes de renunciar para lanzarse al Senado.

¿Qué viene después de que esto pase definitivamente a ser Ley?

El proyecto de Esmeralda Hernández contempla un periodo de transición de tres años en el que el Gobierno debe implementar programas para apoyar a aquellas personas cuyo sustento dependa de las corridas para que el golpe no sea inmediato. Además, está estipulado un año más para convertir las plazas en escenarios para otro tipo de actividades. Esto quiere decir que las corridas no van a estar prohibidas instantáneamente.

Tanto la senadora como el presidente Gustavo Petro y los miles de animalistas que hay en el país salieron a celebrar la buena noticia:

¿Qué significa la aprobación de la prohibición de las corridas de toros en Colombia?

Fue un proceso muy complejo. Un trabajo de muchos años. 14 proyectos de ley se habían hundido anteriormente en el Congreso. Pero en la noche de este martes la Cámara de Representantes nos dio su aval con una mayoría muy importante. Estamos felices. Esta ha sido una lucha y una causa de los defensores de los derechos de los animales de muchos años, de décadas. Fue una plegaria para que Colombia saliera de la vergonzosa lista de los únicos ochos países en el mundo que legalizan la tortura de animales con estas corridas de toros. Este miércoles Colombia amaneció siendo un país más digno, más respetuoso de todas las formas de vida, un país que reconoce los derechos de los animales. Es algo que no tiene precio.

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Los textos aprobados en Senado y Cámara no son muy diferentes, así que la conciliación no tendría mayores problemas. Pero de todas formas ese texto definitivo debe volver a plenarias. Los opositores todavía tienen margen de maniobra para impedir la aprobación. ¿Cómo se blindarán para que el proyecto sea enviado a sanción presidencial?

El proceso no ha sido fácil. Efectivamente, han querido hundir el proyecto por falta de trámite durante muchos meses. Recusaron a más de 50 congresistas, metieron más de 100 tutelas, desarmaron quorum. No fue fácil pero lo más difícil pasó. No conozco antecedente que ningún proyecto se haya caído en la conciliación. Por su puesto, tendremos que dar esa batalla pero ya es un proceso más de trámite. Los textos tienen diferencia de redacción, de forma, pero que no afectan el fondo del proyecto. Confío en que el Congreso dé ese aval final.

Ante una eventual demanda en la Corte Constitucional, que seguramente llegará, ¿el proyecto corre riesgos?

No. Tenemos la tranquilidad y la certeza de que el proyecto es constitucional. ¿Por qué? Los taurinos solamente han mostrado un pedazo de la sentencia de la Corte Constitucional del 2010. Ese texto dice que la tauromaquia así como otras actividades crueles con animales como las peleas de gallos, las corralejas, las cabalgatas y demás, se permitían solamente en unos municipios donde había tradición ininterrumpida y en periodo de tradición. Como en Cali y Manizales, donde solo se puede hacer en época de feria y solo en esas ciudades, no en municipios aledaños. Pero también lo que dijo es que esta tradición se mantenía hasta tanto el Congreso legislara en contrario. La Corte le dio al Congreso la potestad de tomar la decisión de prohibir las corridas de toros o de regularlas. La prohibición es completamente constitucional.

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Hay otro proyecto de ley que regula las corridas de toros. Con el visto bueno a la prohibición, ¿qué pasa con esa iniciativa? ¿qué pasa si se aprueba?

Prácticamente es ley la prohibición del toreo. No puede regularse algo que está prohibido. De entrada, el proyecto estaría fuera de lugar.

Entrando ya al articulado aprobado, ¿qué establece el proyecto?

La abolición de la tortura de los animales, pero también establece un proceso de transición de tres años en el que se implementará un proceso de reconversión laboral para que las personas que subsisten del sector taurino económicamente puedan vincularse a la construcción de ese programa y puedan transitar hacia otras actividades económicas que les permitan su subsistencia, pero que no se lucren del dolor y de la tortura de los animales.

¿Cómo será ese proceso con las personas que trabajan y viven de la tauromaquia?

Llegamos a consensos en este proyecto de ley. Por eso creo que tuvo éxito. El proyecto no elimina las corridas de un día para otro sino que establece un proceso de transición. Primero, se va a identificar a las familias taurinas y se va a establecer un comité para la elaboración de un programa de reconversión laboral que les permita a esas familias transitar hacia otra actividad económica que no tenga que ver con la tortura de animales. Van a participar en la elaboración del programa y van a decir qué tipo de proyecto quieren hacer. Entonces, el proyecto podrá avalar y financiar este programa de reconversión.

¿Y las plaza de toros?

El proyecto incluye un año para su transformación. Esas plazas que hoy son escenarios de muerte y de tortura serán escenarios para conciertos, actividades lúdicas, ferias, actividades deportivas y van a poder funcionar todo el año. Hoy las plazas funcionan solo tres o cuatro días al año y el resto del año están cerradas.

Hay muchos comentarios en redes sociales y también en el Congreso. Aclárenos qué va a pasar con la Feria de Manizales. ¿Se acaba? Además, ¿cómo se verá afectado el Hospital Infantil de Manizales?

Lo del Hospital Infantil de Manizales es una vil mentira. No tengo otra manera de calificarlo. Lo que aporta las corridas de toros al hospital en promedio de los últimos años han sido 35 millones de pesos, eso no sirve ni para las jeringas. Pero, además de eso, todos los años el Concejo de Manizales aprueba un acuerdo en el que exonera en el pago de tributos a las corridas de toros y a los empresarios taurinos. Es decir, lo que ellos donan ‘generosamente’ se les ve retribuido y multiplicado por cuenta de esa exoneración. Frente a la Feria, creo que Manizales tiene un reto enorme y tiene un reto pero además hermoso y es mostrarle el país y mostrarle al mundo cómo puede uno transformar un escenario de esos en un escenario para la vida, para todas las tradiciones y para todo lo que realmente nos representa como colombianos, que los representa a ellos como caldenses.