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La vicepresidenta Francia Márquez indicó que ser parte de un sistema que plantea acciones para la conservación y el cuidado de la vida tiene que permitir que se cierren las brechas de inequidad y desigualdad profunda, pero esto no lo logra la comunidad sola, requiere de los Estados y de recursos financieros.
Cali, 25 de octubre de 2024.
Tras finalizar el Foro Internacional Afrodescendiente: hacia la inclusión y el reconocimiento de los Pueblos Afrodescendientes dentro del Convenio de Diversidad Biológica (CDB), la vicepresidenta de la República, Francia Márquez, indicó que si bien es la primera vez que se realiza un evento de este tipo de manera oficial en el marco de una Conferencia de las Partes (COP) de las Naciones Unidas, lo cual calificó como un avance histórico e incluso representa un acto de reparación, no es suficiente y quedan desafíos por enfrentar. 
Según la vicepresidenta, “en ningún instrumento ambiental se reconoce al Pueblo Afrodescendiente y ya es hora de caminar hacia allá. Quiero reafirmar el llamado con relación a la COP30 sobre Cambio Climático, el próximo año en Brasil, y hacía allá nos alistamos para dar la pelea (…) para mí es un acto de discriminación el no reconocer la presencia, la voz, las propuestas y todo lo que significamos los afrodescendientes en el cuidado de la biodiversidad y el planeta”, manifestó Márquez Mina.
La vicepresidencia a través de un comunicado afirmó que la propuesta, que será llevada ante la plenaria de la COP16, apunta al reconocimiento e inclusión de los Pueblos Afrodescendientes en los mecanismos y órganos del Convenio de Diversidad Biológica (CDB), particularmente en el nuevo programa de trabajo del Grupo 8j, que hace referencia a “respetar, conservar y mantener el conocimiento, las innovaciones y las prácticas de las comunidades indígenas y locales que engloban los estilos de vida tradicionales, en relación con la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica”

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En su intervención en el Foro, Márquez Mina le solicitó a las Naciones Unidas la institucionalización de un Foro Permanente Afrodescendiente en todas las futuras reuniones de la Conferencia de las Partes (COP) e igualmente envió un mensaje al continente africano, ante los reparos que han surgido en algunos de sus países a la propuesta que lidera Colombia y Brasil.
“Algunos han expresado sus preocupaciones o desacuerdos con el reconocimiento de los afrodescendientes. Para mí es un contrasentido, pues es hablar también del reconocimiento de la Sexta Región, que un convenio específico de protección de la biodiversidad no se acompañe Nosotros, desde estos rincones donde nos tocó crecer y donde quedó sembrado nuestro ombligo, estamos en toda la disposición de reconectar con el continente africano”, agregó.
Márquez Mina insistió en que el reconocimiento de la población afrodescendiente en el Convenio de Diversidad Biológica (CDB) es un acto de justicia étnico-racial, e invitó a todas las naciones presentes a que acompañen esta propuesta. “La tarea va a quedar incompleta si no se reconoce al Pueblo Afrodescendiente en el Convenio, porque, aunque los datos estadísticos hayan sido racistas y excluyentes y nos han invisibilizado, somos más de 154 millones en América Latina y el Caribe, y ocupamos más de 205 millones de hectáreas, todas en ecosistemas de biodiversidad”, añadió.
El espacio, contó con la presencia de la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad; el ministro de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo; la presidenta del Foro Permanente de las Naciones Unidas sobre los Afrodescendientes, June Soomer, y la secretaria ejecutiva del Convenio de Diversidad Biológica (CDB), Astrid Schomaker, entre otras personalidades.