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Este martes 16 de noviembre, la periodista de W Radio Paola Herrera fue galardonada con el Premio Simón Bolívar a la mejor periodista del 2021.
Herrera fue la periodista que reveló en el programa Sigue La W los casos de corrupción en el contrato del Ministerio de las TIC con Centro Poblados, polémica que se volvió tema de agenda nacional.
Tras las revelaciones de Herrera en La W, se produjo la renuncia de la entonces ministra Karen Abudinen, quien se vio envuelta en las irregularidades de su ministerio e incluso afrontó un debate de moción de censura en la Cámara de Representantes.
Por lo anterior, los jurados tomaron la decisión de entregarle la distinción por su labor de proteger el patrimonio público de los colombianos, en especial este que afectó a miles de niños y niñas de lugares apartados del país.
“El jurado del Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar reconoce en ella a la periodista del año por su trabajo incansable en la defensa del patrimonio público y resalta su rigor y persistencia de muchos meses para, finalmente, contarle a los colombianos las irregularidades del multimillonario contrato del MinTIC. Ese negocio fallido que afectó a miles de estudiantes, especialmente de regiones lejanas, que siguieron sin conectividad mientras crecía la desigualdad entre las nuevas generaciones”, es parte de la mención del jurado sobre Paola Herrera.
Vigilar que los administradores inviertan con transparencia los recursos públicos es una de las principales misiones del periodismo. Y una de las más difíciles, porque quienes se apoderan de esos dineros recurren a métodos sofisticados para borrar sus huellas. Entonces aparece el periodista de investigación. Este va quemando etapas en silencio, pasa meses sin publicar una letra, siempre con el temor de haber perdido el tiempo en un trabajo que acaso nunca llegue a ver la luz. Muchas veces es una labor solitaria, desgastante, sin más acompañamiento que el “quiubo, ¿cómo va?, ¿cuándo publicamos?” del editor jefe o del director. Noches de desvelo y pesadillas con la fuente secreta, horas de lectura de documentos en busca del detalle revelador, del documento alterado. Al publicar llegan los reflectores, los reconocimientos, pero también el odio de los investigados, la intimidación y no pocas veces los intentos de desprestigio. Situaciones como estas han ocupado la cotidianidad de Paola Herrera. El Jurado del Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar reconoce en ella a la periodista del año por su trabajo incansable en la defensa del patrimonio público y resalta su rigor y persistencia de muchos meses para, finalmente, contarle a los colombianos las irregularidades del multimillonario contrato del MinTIC. Ese negocio fallido que afectó a miles de estudiantes, especialmente de regiones lejanas, que siguieron sin conectividad mientras crecía la desigualdad entre las nuevas generaciones.
Los Ganadores:
Vida y Obra de un periodista