Encuentran en el Caribe una civilización perdida
Científicos han descubierto que los puertorriqueños tienen el vínculo más estrecho con los antiguos taínos.
La cultura taína predominaba en las Antillas Mayores, partes de las Antillas Menores y las Bahamas. No obstante, muchos científicos e historiadores piensan que estos indígenas se extinguieron debido a las enfermedades, la servidumbre y otras consecuencias de la colonización sin transmitir sus genes a los pueblos que habitan en el Caribe hoy en día.
Ahora, un diente milenario hallado en una cueva en la isla de Eleuthers, en las Bahamas, ha permitido a los científicos secuenciar el primer genoma humano antiguo completo del Caribe. Como resultado, se ha obtenido la primera prueba clara de que hubo cierto nivel de continuidad entre los pueblos indígenas del Caribe y las comunidades contemporáneas de la región, informa Science Daily.
Se detalla que el diente pertenecía a una mujer que vivió entre los siglos VIII y X, al menos 500 años antes de la llegada de Colón a las Bahamas.
Tras comparar el genoma antiguo de las Bahamas con el de los habitantes contemporáneos de las islas del Caribe, los científicos descubrieron que los puertorriqueños tienen un vínculo más estrecho con los antiguos taínos que cualquier otro grupo indígena de las Américas, aunque no descartan que en el futuro se encuentren legados genéticos similares en otras comunidades del Caribe.
“Es un descubrimiento fascinante”, ha comentado uno de los autores principales del estudio, Hannes Schroeder, de la Universidad de Copenhague (Dinamarca).
“Estoy sinceramente agradecido a los investigadores. Aunque puede que para ellos haya sido una cuestión de indagación científica, para nosotros, los descendientes, es verdaderamente libertador e inspirador”, ha comentado Jorge Estévez, del Museo Nacional del Indio Americano en Nueva York, descendiente taíno.
Además, el estudio también ha determinado el origen genético de los pueblos caribeños indígenas, demostrando que estaban estrechamente relacionados con las comunidades de lenguas arahuacas que viven en algunas regiones de América del Sur hoy en día. Por lo tanto, el origen de una parte de las personas que emigraron al Caribe puede ser rastreado hasta las cuencas del Amazonas y del Orinoco, donde se desarrollaron las lenguas arahuacas.