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Admiro a Uprimny aunque me critique.

El demócrata debe soportar la crítica.

Eso le dijo el filósofo Estanislao Zuleta a Carlos Pizarro y a quienes lo acompañábamos en Santo Domingo, Cauca, en 1989.

Entre el demócrata y el crítico, que también es un demócrata, debe establecerse el dialogo propio de la democracia.

La razón interlocutoria de Habermas es la forma superior de la razón.

Es la razón de la ciencia y la democracia.

La otra razón es simplemente un calculo transaccional, económico, que solo lleva a utilizar instituciones y personas con fines preconcebidos.

No cambia con la interlocución.

No es razón, sino, prejuicio.

Es propia de la política baja y solo llega a la Política si se convierte en dialogante, en interlocutoria,

la interlocución, reconoce al otro como su igual y no subordinado, el otro es el pueblo y su diversidad, o una persona cualquiera.

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