MARS INSIGHT. Lanzada con éxito la nave que escrutará el interior de Marte
La nave InSight de la NASA, la primera que sondeará el interior de Marte, despegó. Fue lanzada por un cohete Atlas V desde la base aérea de Vandenburg, en California
Tras casi siete meses de viaje por el espacio, InSight aterrizará en el planeta rojo el 26 de noviembre de este año, según informa el Laboratorio de Propulsión a Reacción de la NASA. Su misión será estudiar la composición interior de Marte a través de las vibraciones sísmicas, el flujo de calor y la orientación del eje de rotación del planeta rojo.
La información que InSight revele sobre el interior de Marte servirá para conocer mejor cómo se formó hace 4.500 millones de años y cómo evolucionó durante sus primeros miles de millones de años de vida, lo que dará nuevas pistas sobre los procesos de formación de todos los planetas rocosos.
A pesar de la niebla que nublaba la visibilidad esta madrugada en Vandenburg, el lanzamiento ha ido exactamente como estaba previsto. Tras despegar desde la costa oeste de Estados Unidos, la fase superior del cohete, junto con InSight, ha sobrevolado el océano Pacífico rumbo al Polo Sur. A continuación, ha puesto rumbo al polo Norte –pasando sobre el océano Índico y el centro de Asia–, donde el motor del cohete ha dado un último impulso para situar a InSight en la trayectoria necesaria para que llegue a Marte.
“Es como jugar a golf desde Nueva York y meter la bola en un agujero en California. Ese el nivel de precisión que necesitamos”, ha ilustrado Jim Green, director científico de la NASA, durante la retransmisión en directo del lanzamiento.
Está previsto que InSight aterrice en Marte el 26 de noviembre de este mismo año. Una vez asentada sobre la superficie marciana, desplegará sus grandes paneles solares y pondrá en marcha el instrumental científico para cumplir su misión, que en principio durará hasta 2020.
InSight está provista de un sismómetro que situará sobre la superficie marciana para medir las vibraciones del suelo. La propagación de las ondas sísmicas de cada martemoto –así se llaman en el planeta rojo– por las capas internas de Marte dará nuevas pistas sobre su composición y profundidad, ya que cada material transmite las ondas de forma diferente.
La nave también cuenta con un sensor térmico que clavará dentro del suelo para estudiar el flujo de calor dentro del planeta, lo que permitirá conocer mejor su dinámica interna, que influye en el vulcanismo. Marte tiene volcanes de récord en el Sistema Solar. El más grande de ellos, el Monte Olimpo, mide casi 25 kilómetros de altura –dos veces y media la altura del Everest– y ocupa un área de 300.000 kilómetros cuadrados –lo mismo que Italia–.
InSight también ofrecerá datos más precisos sobre la forma y la orientación del eje de rotación de Marte, sobre la cual los fenómenos internos tienen una gran influencia. Para ello, enviará su posición a la Tierra continuamente a través de su equipo de emisión de radio.
La información que InSight revele sobre el interior de Marte servirá para conocer mejor cómo se formó hace 4.500 millones de años y cómo evolucionó durante sus primeros miles de millones de años de vida. La NASA califica el planeta rojo como un una “máquina del tiempo” o un “fósil planetario”, ya que, a diferencia de lo que ocurre en la Tierra, donde el movimiento de las placas tectónicas remodela constantemente su superficie, la estructura de Marte ha permanecido estable desde hace al menos 3.000 millones de años.
Comparar el interior de Marte con el de la Tierra también ayudará a conocer mejor los procesos de formación de los planetas rocosos, también fuera del Sistema Solar. También podría revelar qué fue distinto en la evolución temprana de los dos mundos para que se convirtieran en planetas tan radicalmente diferentes.
MarCO, los compañeros de viaje de InSight
A bordo del cohete Atlas V han acompañado a InSight dos pequeños satélites en forma de cubo, lo que se conoce como CubeSats. Forman parte de la misión Mars Cube One (MarCO), y son prototipos de la tecnología miniaturizada que se utiliza en los CubeSats, más económica que la se emplea habitualmente en las grandes misiones espaciales. Los satélites MarCO A y MarCO B, los primeros CubeSats que orbitarán un planeta que no sea la Tierra, viajarán hasta Marte separados de InSight. Pero, si consiguen llegar al planeta rojo a tiempo, participarán en la retransmisión a la Tierra de las señales de la nave tras su aterrizaje. Para desplazarse por el espacio, utilizarán el mismo tipo de fluido que emplean los extintores, igual que los robots Wall-E y Eva en la película de Pixar WALL-E –los ingenieros responsables de la misión los han apodado precisamente Wall-E y Eva, según han explicado en la retransmisión en directo del lanzamiento de InSight–.