BARCELONA. LEVANTE, 0 – BARCA. 5 MESSI se agiganta
El argentino decide el encuentro con tres goles una asistencia
El descanso en la Copa del Rey y en la Champions que Valverde ha concedido a Messi no para de dar frutos. Acudía temeroso el Barça a Valencia para medirse al Levante, que la temporada pasada había derrotado a los azulgranas. Pero delante estaba un Messi en estado de gracia. En esa versión esplendorosa que hace que el rival quiera huir del campo. Una asistencia de fantasía y tres goles elevaron al Barçapara escapar de la emboscada hurdida por su rival. La placidez del resultado no debe esconder el incómodo partido que vivieron los de Valverde en el primer tiempo. Pero Messi escondió una vez más el lúgubre inicio azulgrana y lo abarrotó de virtudes.
Este martes Messi recogerá su quinta Bota de Oro. El único trofeo individual que se llevará de la pasada temporada. El único que se basa en las estadísticas y que no le puede negar nadie. Pero la influencia del argentino siempre es mucho mayor que los tantos que consigue. Solo en esta temporada ha sumado además de los 14 goles que le hacen pichichi en Liga, 9 asistencias para sus compañeros.
Messi se echó el equipo a la espalda para liquidarlo antes del descanso
Y en el genio de Rosario hay que buscar la explicación a la victoria del Barça ante el Levante. Durante muchos minutos los de Valverde no encontraron la forma de controlar el juego ante la enorme presión del rival. Paco López planteó un partido de ida y vuelta. Su equipo se mostró entusiasmado en ese escenario, en el que los azulgranas sentían pánico. El exceso de prudencia en las entregas dejó sin profundidad a un Barça que tuvo que salir con carrileros por la lesión de Semedo.
El cambio de sistema, con tres centrales (Piqué, Lenglet y Vermaelen), dejó la banda derecha en grave riesgo. Piqué y Dembelé debían coordinarse para cercenar las entradas de Morales, un velocista temible. Pero ni el central tiene la velocidad del francés, ni el extremo la concentración defensiva del catalán. Ese temor condicionó al Barça durante gran parte del primer tiempo, incapaz de superar con claridad la presión en campo contrario del Levante.
El partido transitaba de área a área sin que nadie encontrase un último pase preciso. Lo inventó Campaña, pero Boateng envió el balón al larguero. La excesiva violencia con la que golpeó el esférico le restó precisión. El Barça aparecía encorsetado en su campo, sin la capacidad que habitualmente le permite gobernar los encuentros.
Pero si el colectivo no funciona, Messi sigue siendo capaz de echarse el equipo a la espalda y resolverlo de forma individual. Pasada la media hora, dos acciones suyas aisladas tumbarían a uno de los púgiles más goleadores de la Liga. En la primera recorrió toda la frontal del área con el balón para atraer a todos los rivales posibles antes de filtrar un pase de fantasía para Suárez, más difícil que la ejecución era advertir la posición del delantero uruguayo. Todo ello lo desarrolló Messi con suma facilidad.
Con más espacios, el Barça encontró más facilidades para el gol
El gol Suárez obligó al Levante a redoblar su agresividad ofensiva. Pero el riesgo trajo sus consecuencias. Busquets recuperó un balón y lanzó la carrera de Messi, que en el mano a mano batió a Oier con la pierna derecha. El partido ya no sería el mismo después de esa jugada. El argentino había noqueado definitivamente a un rival con impotente ante el poderío mostrado por el argentino.
En el segundo tiempo el Levante inclinó el campo para buscar un gol que había merecido en el primer tiempo. Pero con tantos espacios en la retaguardia, el Barça decidió que el Barça se resolvería al contragolpe. Solo dos minutos tardó Messi en hacer su segundo gol de la noche tras un pase de Alba que dejó pasar en el área Suárez.
Pero no se quedó ahí el argentino, que solo unos minutos después anotó el hat-trick que le deja con 14 goles en la Liga. Luis Suárez superó a su marcador con un túnel y habilitó a Vidal en el segundo palo. El chileno, en posición de remate, engañó al personal con un centro al punto de penalti, por donde apareció Messi para certificar la goleada. El quinto fue obra de Gerard Piqué, que terminó mostrando que vuelve a estar a un nivel fantástico.
Tanto frente al Espanyol como ante el Levante, Messi ha liderado al Barça para mantener un liderato que todavía discuten Sevilla y Atlético de Madrid. El argentino sigue gobernando los partidos como nadie. En esta Liga nadie puede discutir su poderío. No se habrá llevado los últimos Balones de Oro, pero mientras mantenga la ambición, nadie habrá más decisivo sobre un terreno de juego que él.
Ficha técnica:
Levante, 0 – Barcelona, 5
0 – Levante: Oier, Jason, Cabaco, Postigo (Prcic, m.70) Róber Pier, Rochina (Coke, m.70), Campaña, Bardhi, Toño, Boateng (Borja Mayoral, m.62) y Morales.
5 – Barcelona: Ter Stegen, Piqué, Vermaelen (Arthur, m.52), Lenglet, Rakitic, Vidal (Coutinho, m.78), Busquets, Jordi Alba, Dembélé (Denis Suárez, m.81), Messi y Suárez.
Goles: 0-1, m.35: Luis Suárez. 0-2, m.43: Messi. 0-3, m.47: Messi.0-4, m.60: Messi. 0-5, m.88: Piqué.
Árbitro: González González (Comité castellano-leonés). Mostró tarjeta amarilla a Rober Pier y Jason, por el Levante y a Dembele, Rakitic y Jordi Alba por el Barcelona. Expulsó con tarjeta roja directa a Cabaco (m.76).
partido correspondiente a la jornada 16 de LaLiga Santander disputado en el Ciutat de València ante 27.370 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el exjugador del Levante de la década de los 50 Blai Ozcoz Borrás, fallecido recientemente.