Juan Manuel Esparza Niño es el Bachiller Ecopetrol 2017
Estudió en la Escuela Industrial de Oiba, una institución rural localizada al sur del departamento. Quiere continuar sus estudios de ingeniería electrónica y dedicarse a la investigación.
Cursa segundo semestre de ingeniería electrónica en la Universidad de Antioquia, tiene 16 años y le encantan las matemáticas y la física. Sueña con terminar su pregrado y continuar estudios de doctorado para aprender más del lenguaje de la programación y modelar los problemas desde la física.
Este es Juan Manuel Esparza Niño, criado en Oiba, el Pueblito Pesebre de Colombia, quien fue el ganador de la beca Bachilleres Ecopetrol por el departamento de Santander.
Se graduó de bachiller en la Escuela Industrial de Oiba, localizada a 150 kilómetros al sur de la capital santandereana. Obtuvo un puntaje de 394 en las pruebas Saber, lo cual le mereció pertenecer al grupo de 35 jóvenes colombianos cuyos estudios de pregrado serán financiados en un 90% por Ecopetrol.
La beca le llegó en el mejor momento a su mamá, Sandra Liliana Niño Barragán, quien tiene a Luis David, su otro hijo, estudiando medicina también en la Universidad de Antioquia.
“Yo tengo un pedazo de tierra donde cultivo café y fríjol, y con lo que se va haciendo es para pagar la educación de mis hijos. Trabajo en lo que se pueda”, explicó la madre de Juan Manuel.
Había aplicado al programa de Ser Pilo Paga pero no logró clasificar, por lo que cuando lo contactaron de Ecopetrol para iniciar el proceso, no daba crédito a la noticia, explicó Sandra Liliana.
Ella lo define como un joven muy maduro para la edad que tiene, amante del ajedrez, las danzas folclóricas y el tiple, instrumento musical que lleva para todos lados, haciendo honor a la tierra que lo vio crecer.
“Es un orgullo que se gane algo tan importante como la beca por su nivel académico. Para mí es una garantía que su estudio esté asegurado y que pueda terminar la carrera. En la vida nunca me lo imaginaba. Uno cree que esto es para gente de la ciudad, que estudia en colegios privados con más acceso a información, pero esto fue una gran sorpresa”, afirmó la mamá de Juan Manuel, sin ocultar la emoción.
Su mérito como madre soltera fue el inculcarles el hábito de la lectura desde que eran niños, una costumbre que se convirtió en rito por las noches, antes de dormir, siempre que están juntos.
Asegura que este reconocimiento es una motivación para sus compañeros de colegio, así como para otros alumnos de instituciones rurales, quienes pueden aspirar a una beca de Ecopetrol que les permita alcanzar el sueño de estudiar una carrera universitaria.