ATP FINALS 2.017. Londres, 12 al 19 de nov. Los 8 candidatos a ‘Maestro’
Rafael Nadal, Roger Federer, Alexander Zverev, Grigor Dimitrov, Marin Cilic, Dominic Thiem, David Goffin y Jack Sock. Esos son los distintos nombres que pasarán por la pista del O2 Londinense del 12 al 19 de noviembre con el objetivo de cazar la Copa de Maestros de la ATP.
Entre todos suman 216 torneos ATP y 36 Grand Slams, amén de seis títulos de ‘Maestro’, todos en posesión de Federer. Nadal nunca ha ganado este torneo (perdió las finales de 2010 y 2013) y para Zverev y Dimitrov será su primera participación.
El primero, que a sus 20 años ya está llamado a ocupar el número uno en los próximos tiempos, es el mayor exponente de la llamada NextGen. Esa a la que también pertenece, aunque ya cuente 24 primaveras, Dominic Thiem.
Ellos son los señalados para destronar a la vieja guardia, representada aquí por Federer, Nadal y Cilic, a la que también pertenecen los lesionados Murray, Djokovic y Wawrinka, y a dominar el tenis mundial cuando estos decaigan o ya no estén. La lucha generacional está servida en las ATP Finals.
Rafael Nadal
(1º en la carrera y el ránking, 10.645 puntos, 67-10)
Año mágico para el manacorí, que superó definitivamente sus problemas físicos para volver a dominar el circuito. Empezó con cuartos en Brisbane, final en el Open de Australia ante Federer, final en Acapulco ante Querrey y final en Miami de nuevo contra el suizo. Perdió todo, pero se repuso para ganar en Montecarlo, Barcelona y Madrid. Dos Masters 1.000 y un ATP 500. Siguió con cuartos en Roma, su décimo Roland Garros (6-2, 6-3, 6-1 a Wawrinka) y cuartos en Cincinnati. Antes, en Wimbledon, el luxemburgués Gilles Müller le echó en dieciseisavos en un partido antológico de más de cuatro horas y media de duración y 28 juegos en el definitivo quinto set. Su año se completa con su tercera victoria en el US Open y otra en Pekín, además de otra derrota ante Federer en la final de Shanghái y cuartos en París, donde se retiró ante Krajinovic tras sufrir molestias en su rodilla derecha frente a Cuevas. También en París se aseguró el número uno de final de temporada ganando en primera ronda al coreano Chung. En su cara a cara particular con sus compañeros de grupo, ha ganado siempre a Goffin (3-0), nueve veces de diez a Dimitrov y sólo consigue ponerle en apuros Thiem, que ha perdido cinco de siete con él pero le ha ganado en los cuartos de Roma esta temporada y en semis de Buenos Aires el año pasado.
Roger Federer
(2º en la carrera y el ránking, 9.005 puntos, 49-4)
Otro al que algunos ya desterraban del máximo nivel tras un 2016 sin títulos que acabó prematuramente en Wimbledon por su problemas de espalda y que ha vuelto como el otoño. Este año viene de ganar su quinto Open Australia ante Nadal y su octavo Wimbledon ante Cilic. También ha triunfado en tres Masters 1.000: Indian Wells, Miami y Shanghái, y en los ATP 500 de Basilea y Halle para sumar la barbaridad de 95 títulos ATP, superando a Lendl y quedando como el segundo que más acumula de la historia, sólo por detrás de Jimmy Connors (109). Ante sus rivales de grupo, está inmaculado con Sock (3-0), casi con Cilic (4-1) y se le da mal Zverev (2-3 con dos derrotas este año, una en la final de Montréal).
Alexander Zverev
(3º en la carrera y el ránking, 4.410 puntos, 54-20)
Renunció a su participación en unas NextGen Finals cuya carrera lideraba con holgura para centrarse en su primera participación en el Masters tras una temporada que ha sido la de su confirmación como aspirante a dominar el tenis de la próxima década. Mostró su mejor nivel entre mayo y principios de agosto, cuando encadenó cuartos en Madrid, victoria en Roma (Masters 1.000), semis en s-Hertogenbosch, final perdida ante Federer en Halle y victorias en Washington (ATP 500) y Montréal (Masters 1.000). Antes se hizo con los ATP 250 de Montpellier y Múnich y cuartos en Miami y después cuartos en Shenzhen (ATP 250), semis en Pekín (ATP 500), y cuartos en Viena (ATP 500). ¿La pega? No rindió en los Grand Slams, cayendo a las primeras de cambio en Francia y muy pronto también en Australia, Estados Unidos y Gran Bretaña.
Dominic Thiem
(4º en la carrera y 8º en el ránking, 3.815 puntos, 54-22)
Le saca 4 años a Zverev. Tiene 24 por 20 del alemán. Pero su explosión más tardía le coloca junto a él como los dos líderes de la NextGen, exceptuando a Kyrgios hasta que se dedique a hacer otra cosa que no sea armar jaleo dentro y fuera de la pista. Su tenis es agresivo y su cabeza está mejor amueblada que la de la mayoría de sus compañeros de generación. Este año alcanzó cuartos en Brisbane y Sidney (ambos ATP 250) a las primeras de cambio para caer en dieciseisavos de Australia ante Goffin, seguir con cuartos en Rotterdam (ATP 500), ganar en Río (ATP 500) y terminar la primera mitad del año con cuartos en el también 500 de Acapulco y en el Masters 1.000 de Indian Wells, finales perdidas en Barcelona y Madrid ante Nadal, semis en Roma ante Djokovic y semis en Roland Garros ante Nadal. A partir de ahí le ha ido un poco peor. Ha caído en dieciseisavos de Wimbledon, en cuartos de Cincinnati (Masters 1.000) y desde entonces ninguna ronda lejana para él, que llegará algo más fresco que sus rivales.
Marin Cilic
(5º en la carrera y el ránking, 3.805 puntos, 44-19)
Su año comienza realmente en Rotterdam, donde cae en cuartos ante Tsonga. Pierde en semis de Acapulco contra Nadal y en cuartos de Montecarlo contra Ramos, se lleva Estambul (ATP 250) y vuelve a caer en cuartos de Roma y Roland Garros consecutivamente. No puede con Karlovic en semifinales de s-Hertogenbosch ni con Feliciano López ni Federer en las finales de Queen’s y Wimbledon. Los tres torneos sobre hierba, su superficie favorita y, a pesar de todo, en la que más rinde, con un 80% de victorias este año. Después ha llegado a semis en el ATP 500 de Tokyo, semis en Shanghái ante Nadal, semis en Basilea ante Del Potro y cuartos en París ante un sorprendente Benneteau.
Grigor Dimitrov
(6º en la carrera y el ránking, 3.650 puntos, 44-19)
No ha tenido un año espectacular pero sí regular. En el primer tercio se llevó Brisbane y Sofía (ambos 250) y llegó a semis en Australia y cuartos en Rotterdam. En el segundo, el peor, sólo hizo semifinales en Queen’s y se le atragantaron los Masters 1.000: no pasó de dieciseisavos en ninguno y sólo los alcanzó en Madrid y Montréal. Y en el tercero se ha impuesto en Cincinnati, ganando a Kyrgios en la final; ha alcanzado las semifinales en Pekín, los cuartos en Shanghái, y la final en Estocolmo. Siete títulos ATP sin Grand Slams ni Finals se antojan poca cosa para alguien a quien se ha llegado a comparar con Federer. En Londres tendrá una nueva oportunidad para demostrar que el símil puede llegar a hacerle justicia.
David Goffin
(8º en la carrera y el ránking, 2.975 puntos, 54-22)
No es séptimo en la carrera porque por delante marcha el suizo Wawrinka, al que su lesión le ha impedido estar en Londres pero no estar entre los 8 mejores tenistas de la temporada. El belga suma este año cuartos en Australia, Madrid, Umag, Gstaad, Metz y Antwerp (los cuatro últimos de categoría 250); semis en Montecarlo y Basilea, dos finales perdidas en Sofia y Rotterdam ante Dimitrov y Tsonga, respectivamente, y dos ganadas en la última parte de la temporada, ante Dolgopolov en Shenzhen y ante Mannarino en Tokio. Combativo es el adjetivo que mejor encaja con él. Pelea hasta el final, muchas veces sin importarle sus molestias físicas.
Jack Sock
(9º en la carrera y el ránking, 2.765 puntos, 36-19)
Ha escalado hasta 15 puestos en la carrera ante la inoperancia de sus predecesores: Carreño, Querrey e Isner. Sólo Del Potro dio el do de pecho en la pelea por la última plaza de las Finals y Sock, ganando en París y firmando cuartos en Basilea y Estocolmo, se ha metido. A lo largo del año ha firmado dos victorias más, en los 250 de Auckland y Delray Beach; otros cuartos en Miami y Atlanta (ATP 250) y tres semis en Indian Wells, Houston (ATP 250) y Washington (ATP 500). Es la cenicienta del torneo, pero su nacionalidad le da un plus de competitividad. No se entregará ante nadie.