ARGENTINA. Muere la periodista y diputada Débora Pérez Volpin durante una sencilla prueba médica
La Justicia abre una investigación contra la clínica por posible “homicidio culposo”. La popular conductora, de 50 años, falleció de un infarto mientras era sometida a una endoscopía
La periodista y diputada argentina Débora Pérez Volpin entró el lunes a una clínica privada de Buenos Aires a hacerse una endoscopía, un estudio programado para localizar el origen de los dolores estomacales que había sufrido en las últimas semanas. Pero bajo los efectos de la anestesia sufrió un paro cardíaco irreversible. Tenía 50 años y era una de las caras más conocidas de la televisión argentina.
“Débora no resistió la anestesia. Tuvo un infarto durante un procedimiento endoscópico”, dijo en TN su colega Guillermo Lobo. Los especialistas señalan que es un estudio mínimamente invasivo y de bajo riesgo que requiere anestesia general.
La familia denunció al sanatorio La Trinidad de Palermo y la Justicia abrió una investigación contra el centro médico por supuesto “homicidio culposo”. El juez espera el resultado de la autopsia, que podría ayudar a entender por qué murió.
Hija de un médico que fue director del hospital Fernández, Pérez Volpin renunció a los planes paternos de estudiar Medicina y dirigió sus pasos hacia el periodismo.
Fue productora radiofónica, colaboradora en diarios y después, reportera de varios programas televisivos hasta llegar a convertirse en una de las presentadoras estrellas del canal 13. En los medios de comunicación y las redes sociales, sus excolegas, amigos y televidentes han expresado su tristeza por su muerte repentina.
El año pasado, Pérez Volpin, con dos hijas adolescentes, saltó del periodismo a la política. Se presentó como candidata a legisladora en la ciudad de Buenos Aires y asumió su banca el pasado diciembre. Después del receso veraniego, esperaba reanudar su labor parlamentaria el próximo marzo.
Investigadores de a muerte de Pérez Volpin: allanaron el Sanatorio La Trinidad y secuestraron documentación
Los voceros consultados explicaron que el operativo estuvo a cargo de personal de la comisaría 23° y que fueron secuestrados “el libro de enfermería”, “la hoja de guardia” y la historia clínica” de la paciente.
La investigación de la muerte de Pérez Volpin, que ocurrió ayer en el Sanatorio La Trinidad, está en manos del Juzgado Criminal y Correccional N° 57, a cargo del juez Gabriel Ghirlanda. Fuentes judiciales informaron que la causa fue caratulada como homicidio culposo.
Ya no serán tan tiernas las mañanas
“Arriba, remolones”. Con esa frase, cada mañana, Débora Pérez Volpin le quitaba por un momento el peso al rigor informativo para conectarse con su televidentes en Arriba argentinos, el noticiero que conducía por la pantalla de Eltrece junto a Marcelo Bonelli. Esa era, posiblemente, una de sus grandes características: la capacidad de ser implacable cuando era necesario, pero también tierna y cariñosa con su público.
Pérez Volpin había nacido el 30 de diciembre de 1967 en la Ciudad de Buenos Aires. Y, aunque en su niñez soñaba con seguir el camino de la medicina como lo había hecho su padre, muy pronto descubrió que su vocación era otra. Fue en el Colegio Nacional Buenos Aires donde, a través de un taller, comprendió mejor de qué se trataba eso de “comunicar”.
Comenzó a trabajar como productora en Radio Belgrano, al tiempo que cursaba sus estudios universitarios. También puso un pie en la gráfica, al colaborar con revistas como 13/20 y Ser Única, y en otros medios como Diario Popular, La Nación y Clarín. Pero en 1992 ingresó como pasante al Grupo Artear, donde tuvo la posibilidad de sumarse al equipo que se estaba armando para la señal de noticias TN.
Muy pronto, Débora pasó de las tareas de producción a la calle, suplantando a los cronistas que se encontraban de vacaciones. Así se inició como movilera y descubrió que la cámara no sólo le sentaba muy bien, sino también que esa tarea de contar lo que estaba pasando era lo que realmente quería hacer.
En 1996, la mezcla de soltura y mesura que tan bien manejaba la llevó a probarse como conductora de la señal de noticias. Mario Mazzone, Marcelo Lobo, Luis Otero y Santo Biasatti fueron algunos de los periodistas con los que hizo dupla, en distintos espacios informativos de TN y Eltrece. Junto a Juan Miceli, fue la encargada de dar el resumen informativo del día con En síntesis, entre 2004 y 2005.
El cambio de horario, de la trasnoche a la primera mañana, llegó con Arriba Argentinos, en abril del 2005. Débora fue la encargada entonces de poner una dosis justa de ternura para despertar a los televidentes entre noticia y noticia. Y lo hizo muy bien, cuando la explosión de las redes sociales dejó a la vista que su carisma traspasaba plenamente la pantalla.
Su paso a la política
Alentada quizás por ese ida y vuelta con su público, Pérez Volpin decidió que era tiempo de volver de alguna manera a la calle para escuchar y atender los problemas de la gente. Tentada por Martín Lousteau, aceptó el desafío de presentarse como precandidata a diputada porteña por el Frente Evolución en PASO de agosto de 2017.
Antes, se había despedido formalmente de su rol de conductora. “¡Qué lindos que son! Estoy muy contenta y les agradezco por esto de corazón. Esta es mi casa. Voy a seguir al lado de ustedes desde otro lugar, con otro espacio, otra dinámica, haciendo otra cosa. Pero con el mismo compromiso de siempre. Los quiero mucho”, decía el 21 de junio pasado, luego de ver un clip que reunía sus mejores momentos como movilera, entrevistadora y conductora, además de algún que otro blooper.
La emotiva despedida de Débora Pérez Volpin de El Trece
“Lo que traigo como carga personal es el escuchar a la gente y eso lo estoy disfrutando muchísimo en campaña. Es algo que hacía como periodista, que lo estoy disfrutando, pero cuando no hay una cámara muchas veces la gente se abre más y te brinda sus miedos, inquietudes y confianza. Esos cambios están en línea con lo que yo quiero para mí”, le contó a LA NACION cuando promediaba la campaña. Finalmente, tras superar la prueba de las PASO, Pérez Volpin se hizo de una banca en la Legislatura porteña en octubre.
El domingo por la noche, la diputada porteña asistió a la clínica La Trinidad por un dolor de estómago y fue atendida por su médico personal. Allí se decidió que le harían unos estudios. Según trascendió, sufrió un paro cardiorespiratorio debido a una mala reacción a la anestesia, cuando la estaban realizando una endoscopía. Tenía 50 años y era madre de dos hijos, Agustín, de 19, y Luna, de 17, fruto de su relación con el camarógrafo Marcelo Funes, de quien se separó años atrás.