CUANDO TÁNATOS SE DISFRAZA
Nada es como parece, ni siquiera Tánatos suele serlo, pues muchas veces se disfraza de princesa, para disfrutar de un dulce presente, en la noche de las ánimas.
Ellas, las ánimas, sin reconocer quien es, le dan gracias por venir y le invitan a pasar al convite.
Dentro, en el salón, están Apolo, Zeus, Electra y Afrodita.
Están todos menos Tánatos; aunque ellos saben que ella está siempre ahí, detrás de la puerta, en el fondo del ático, tras las cortinas; o quizás solo en cada una de sus mentes.
Juan Carlos Mantilla (El Marqués)