BUENOS AIRES. Francisco de Narváez, el primer extranejro elegido al Congreso argentino. Su familia fundó Almacenes TIA en Colombia, Argentina, Ecuador y Uruguay
Los 19 almacenes Tía que hay en Colombia cerraron sus puertas.
Hace varias décadas, Almacenes Tía era el destino de las familias para comprar los aguinaldos navideños, pero el auge de las grandes cadenas de retail fue reemplazando esta costumbre. Por eso, la que otrora hubiera sido una gran temporada de ventas, este año será el cierre de 77 años de historia.
Los 19 almacenes Tía que hay en Colombia cerraron sus puertas, debido a que la compañía no logró enfrentar las bajas ventas, los nuevos formatos de comercio como hard discount o descuento duro, los efectos de los Tratados de Libre Comercio, ni consiguió superar el impacto de la llegada de millones de productos chinos al mercado local.
Francisco De Narváez tiene en su curriculum un logro que ningún otro dirigente se podrá anotar. En 2009, la boleta que llevaba su nombre venció a la de Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires. Tras aquella gesta electoral, se vaticinaba para su carrera un ascenso que en algún momento lo llevó a pensar en una intervención de la Corte para posibilitar una candidatura a la Presidencia.
Pero la política es perversa. Y el sueño se desvaneció. Aquella alianza que forjó en 2009 con el actual presidente, Mauricio Macri, y el diputado nacional Felipe Solá naufragó poco después de las elecciones. El kirchnerismo volvió a hacerse fuerte y Cristina Kirchner tuvo en las urnas una performance demoledora en 2011 que postergó a toda la oposición.
En 2015, De Narváez intentó pelear una vez más por la Gobernación de la provincia de Buenos Aires junto a Sergio Massa. Nunca quedaron en claro cuáles fueron los motivos, pero cuando la campaña estaba encaminada decidió bajarse y apoyar públicamente a Daniel Scioli en su carrera a la Casa Rosada. Tiempo después renunció a su banca en la Cámara de Diputados. Y su nombre desapareció de los diarios.
A un año y medio de aquella decisión, De Narváez reapareció esta semana en una reunión con Macri en la Quinta de Olivos. La foto generó algunas especulaciones, pero fue el propio empresario quien se encargó de barrerlas durante una entrevista con el diario La Nación: “La política es un ciclo que cerré para siempre; para siempre quiere decir para siempre“.
“Disfruté mucho de mi vida política que es muy intensa, también muy egoísta para quienes acompañan como tu familia, y decidí que ya había cumplido mi ciclo. Inmediatamente me dediqué a lo que nunca dejé de ser: un emprendedor y fuimos construyendo las distintas empresas“, detalló.
Pese a que decidió dar un paso al costado y volcarse exclusivamente a los negocios, De Narváez continúa siendo un lúcido analista de la realidad política. Contó, por ejemplo, que en el encuentro de esta semana vio a un Presidente “seguro del rumbo”, aunque tiene claro que el éxito de un país no depende sólo de un Gobierno, sino también de la oposición, los sindicalistas y los empresarios.
De Narváez, que supo ganar y perder frente al kirchnerismo, cree que la administración anterior dejó “un populismo peligroso” que impuso la idea de que el Estado debe resolver todos los problemas de la gente. Si bien cree que el Estado debe tener un rol fundamental en la seguridad, educación, justicia y salud, considera que el esfuerzo personal debe ser una variable para lograr un trabajo honesto y avanzar en la vida. “El esfuerzo paga”, resumió.
Francisco de Narváez nació en Bogotá., COLOMBIA
Su madre Doris Steuer se casó con Juan Salvador de Narváez Vargas, un colombiano dedicado al negocio del café. Su familia materna se dedicaba al comercio, siendo su abuelo Karel Steuer, la imagen familiar más influyente. Este último era dueño desde 1933 del pequeño negocio Casa Te – Ta (“tía” en idioma checo), una tienda de regalos para niños.
Junto a su socio, extendieron su negocio a Rumania y Yugoslavia, hasta que la crisis europea los forzó a huir a Argentina en 1939, con una escala previa en Colombia.
En 1946, Carlos Steuer inauguró Casa Tía en Buenos Aires. Por su línea paterna, De Narváez proviene de una tradicional y prominente familia bogotana.
Su padre era bisnieto del presidente de Colombia José Manuel Marroquín, que gobernó los destinos del país entre 1901 y 1904.
Los documentos de radicación de Francisco De Narváez señalan que su ingreso al país se produjo el 5 de abril de 1957.
Entre 1953, cuando llegó por primera vez, y esa fecha había entrado y salido de la Argentina con su madre varias veces. Sus padres se instalaron en Buenos Aires cuando él tenía tres años, apenas derrocado el gobierno de Juan Domingo Perón.
Su padre, Juan Salvador De Narváez Vargas, falleció el 5 de marzo de 1955 y dejó por hijos, además de Francisco, a Juana, Carlos y María Isabel.
A comienzos de la década del 60, Francisco De Narváez cursó la escuela primaria en el colegio Cardenal Newman. Al terminar el colegio primario, la familia de Francisco De Narváez tenía otros planes para él: que siguiera los pasos de su hermano Carlos, que hacía su camino en un liceo militar de Canadá.
En 1966, a los 13 años, De Narváez se fue a estudiar al extranjero en el St. Andrew’s College, pero luego abandonó sus estudios secundarios y comenzó como administrativo a formarse en Casa Tía. Pocos años después terminó el secundario en el Instituto Superior Juan XXIII.
Se casó en 1973 con María Sara Fecchino, con quien tuvo tres hijos: Paco nacido en 1976, Martín en 1978 y Jazmín en 1983.
Actividad empresarial
De Narváez se fue a trabajar a Concordia, Provincia de Entre Ríos, con un ex compañero de la escuela secundaria, Gustavo Rapetti, en un negocio de consignación de ganado, donde se ocupó de la organización y la administración de la compañía, que además se dedicaba al engorde de ganado y a la compraventa de campos. Estuvo trabajando allí entre 1977 y 1981. Fue su primera experiencia agropecuaria.
En 1992, a los 39 años y superado por el estrés, De Narváez quiso suicidarse en una habitación del hotel Hyatt. En una entrevista exclusiva con el periodista argentino Jorge Fontevecchia, De Narváez explica: «Fue el final de un proceso muy duro, de transformación familiar, profesional, y una exigencia que me llevó al borde de esa situación. Una cicatriz que superé, pero que fue consecuencia de un estrés fenomenal».
Prestó juramento para ser ciudadano argentino el 27 de noviembre de 1992. Ese mismo día el juez envió un oficio a la Cámara para que De Narváez fuera anotado en el padrón electoral nacional. Desde ese día pudo votar.
De Narváez tiene dos tatuajes: uno en el cuello el símbolo de la serpiente de agua en el horóscopo chino y otro en el brazo como símbolo de oriental de la crisis.
De Narváez, ya separado en 1981 de María Sara Fecchino, contrajo matrimonio nuevamente con Agustina Ayllón en mayo de 2001, con quien tuvo 3 hijos: Milena nacido en 2004, Juan nacido en 2007 y Antonio nacido en 2009.
A fines de la década de 1980 aumentó su participación en Casa Tía para iniciar “un proceso de renovación comercial y tecnológica” que determinaría la desvinculación de la mayoría de los empleados, 3.500 de los 5.000.7
En 1995 en un trabajo de investigación de Stacy Palestrant de la Universidad de Harvard sobre De Narváez, él opina:
«La mayoría de la gente que despedí tiene más de 25 años de experiencia en Tía; en conjunto me deshice de 5.000 años de experiencia. En un momento la empresa perdió su cultura; todo lo bueno y lo malo. Despedí a todos, desde cajeros hasta asistentes de gerentes. Gente que en el pasado había dirigido la empresa y, ahora, si no estaban de acuerdo con una idea, no la llevaban a cabo. Fue una decisión difícil de tomar y aún vivo con eso todos los días. No tiene sentido pensar en forma justa. No hay justicia.»7
Al promediar los 90 su fortuna se dirigió hacia las finanzas, luego de la venta de Casa Tía con los Deutsch. De Narváez se diversificó y se lo señala constantemente como dueño o accionista ya que siguió invirtiendo su dinero en empresas.
El 30 de abril de 2004 pasó a controlar la totalidad de la Rural S.A. (SRA) –que ya no administra desde fines de 2012 y adquirió uno de los cinco canales de aire de Buenos Aires: América TV; donde hoy es un socio minoritario. E
n 2005 compró el 20% del diario Ámbito Financiero, que en la actualidad es propiedad total de Orlando Vignatti, y un año más tarde compró todo el paquete accionario del diario El Cronista que aún maneja.
Trayectoria política
Fue candidato a un puesto del gabinete nacional acompañando a Carlos Menem en las elecciones presidenciales de 2003. En dichos años también fundó el Grupo Unidos del Sud, una fundación dedicada al estudio e implementación de reformas sobre políticas públicas en los tres niveles de gobierno (nacional, provincial y municipal).
Diputado nacional (2005-2010)
En las elecciones legislativas de 2005 salió electo diputado nacional por la provincia de Buenos Aires con el Partido Justicialista (PJ), siendo cuarto en la lista de diputados que presidía Hilda “Chiche” Duhalde. De esta manera, se convirtió en el primer extranjero en llegar a la Cámara.
En los cinco años que ejerció en su mandato como Diputado, habló 4 veces en el recinto, todas ellas en 2006, a pesar de haber sido calificado de ser “un tipo comprometido y laburador” por el diputado mendocino del Partido Demócrata Omar De Marchi. Dos de ellas fueron para presentar cuestiones de privilegio, y una para apoyar un proyecto presentado por el oficialismo.
Después de un primer período con poca asistencia al recinto legislativo en diciembre del año 2009 asumió su segundo mandato como Diputado por la Provincia de Buenos Aires dentro del bloque Peronismo Federal.
Durante el año 2011 pronunció 385 palabras como diputado, ubicándose en el puesto 220 en cantidad de palabras emitidas.
Creó la fundación Creer y Crecer con equipos para trabajar en las áreas de infraestructura, educación, salud, economía, justicia y seguridad. Los técnicos académicos que reclutaron venían de casi todo el arco ideológico.
Para las elecciones legislativas de 2009 acordó una alianza con Mauricio Macri y Felipe Solá con rumores de la colaboración del ex gobernador Eduardo Duhalde. De la lista presentada por Unión Pro fueron incorrectamente impugnadas 5 candidatas (Silvia Majdalani, Natalia Gambaro, Silvia Lospennato, Ana María López y Claudia Rucci), por la Justicia Electoral debido “no estaba debidamente certificado el requisito constitucional de residencia inmediata mínima de 2 años”, posteriormente apelado y anulado lo que permite a candidatas como Gambaro y Rucci ejercer un cargo legislativo desde 2009. En estos comicios la lista obtuvo una ajustada victoria en la provincia de Buenos Aires, logrando un total de 34,5% superando a FPV: 32.3% (Kirchner – Scioli) y Acuerdo Cívico Social 21.1% (Stolbizer – Alfonsín).Con estos resultados, De Narváez logró renovar su banca de diputado Nacional que obtuvo en 2005 y, además, la coalición logró incorporar 13 nuevas bancas al Congreso Nacional.
En la campaña para las elecciones presidenciales de 2015 De Narváez se alió con Sergio Massa, en la cual estaba anotado para competir en la interna para gobernador del Frente Renovador junto a otros candidatos. En junio de aquel mismo año desistió de su candidatura argumentando que debía ser necesaria una alianza entre Sergio Massa y Mauricio Macri para derrotar al oficialismo, hecho que finalmente no ocurrió. Pocos días antes había mantenido una pelea a golpes de puño con el director del portal de noticias Agencia Nova, al cual Francisco de Narváez denunció penalmente por difamación.
El 3 de diciembre de 2015 renunció a su banca de Diputado Nacional por la Provincia de Buenos Aires, retirándose de la política definitivamente.