Los creadores de Superman, Batman y la Mujer Maravilla se inspiraron en héroes mitológicos
¿Quién no ha soñado con tener súper poderes? Es una fantasía tan antigua como la humanidad misma.
Los superhéroes ya existían mucho antes de que los cómics los hicieran populares y las películas convirtieran a figuras como Spider-Man, Superman y la Mujer Maravilla en máquinas de dinero.
Hace miles de años, los griegos, romanos, pueblos nórdicos, indígenas precolombinos y cientos de otras culturas ya habían creado sus propios héroes con poderes sobrehumanos.
De hecho, muchos de nuestros superhéroes contemporáneos, sus rasgos y habilidades se inspiraron en estos personajes clásicos y, en algunos casos, se copiaron directamente, como el Thor de Marvel o el Hércules de Disney.
Esta es la mitología que inspiró a Marvel y DC para dotar a sus héroes con súper poderes.
1. Hércules, el Hulk de la antigüedad
Al igual que Hulk, Hércules es una de las estrellas de los cómics de Marvel y un personaje del mismo nombre es el protagonista de una película animada de Disney.
Pero la leyenda de Hércules en realidad tiene miles de años.
Originalmente un semidiós de la antigua Grecia llamado Heracles, su nombre se transformó a Hércules al ser incorporado en la mitología romana.
Hijo de Zeus y de la hermosa mortal Alcmene, nació con fuerza y energía sobrehumanas.
Entre otros logros notables, Heracles/Hércules completó 12 misiones imposibles, mató a varios monstruos, sostuvo el cielo durante un tiempo (para darle a Atlas un descanso), ganó todas las categorías en los primeros Juegos Olímpicos e incluso luchó y derrotó a la propia Muerte.
2. Aquiles, el héroe con una flaqueza mortal
Hijo del rey griego Peleo y de la ninfa marina Tetis, Aquiles fue la estrella de su generación, sin embargo, todo superhéroe tiene que tener una debilidad pues, sin algún riesgo perderíamos el interés.
El terror de Superman es la kryptonita, para Wolverine es la espada Murasama, y la original Mujer Maravilla (en su primera aparición de 1941) perdía todos sus poderes si sus pulseras eran atadas por un hombre.
Aquiles fue el héroe de la guerra de Troya y el guerrero más grande de la mitología griega, pero él también tenía una curiosa debilidad. Sí, lo adivinaste, su talón.
Cuando era bebé, una profecía predijo que moriría joven.
Temeroso de la profecía, su madre fue al inframundo para zambullir a su hijo en el río Estigia, lo que le daría poderes de invulnerabilidad. Pero como al hundirlo lo sostuvo del talón, esa parte de su cuerpo se mantuvo seca.
En algunas versiones de la leyenda de Aquiles, cae mortalmente herido por una flecha que le penetra el talón, aunque esto no sucede en la Ilíada, la fuente principal de su historia.
Fue esta leyenda la que dio origen a la expresión “talón de Aquiles”, que significa una debilidad en alguien que generalmente se considera fuerte.
3. Odiseo, prototipo del paladín inteligente y astuto
Odiseo es el legendario rey de Ítaca, más conocido como el héroe del poema épico La Odisea, que cuenta la historia del memorable viaje de diez años del héroe de regreso a casa después de la Guerra de Troya.
Odiseo (Ulises para los romanos) enfrenta muchos desafíos, obstáculos y problemas en el camino pero, al igual que Batman, se sobrepone a sus adversarios con su inteligencia y astucia.
Cuando es capturado por el cíclope Polifemo, un gigante de un ojo que devora a varios de sus hombres, Odiseo primero le dice a Polifemo que su nombre es “nadie” y luego convence al gigante de que beba hasta que cae embriagado.
En ese estupor, el héroe lo ciega con una estaca de madera. Polifemo grita de dolor, pero cuando los otros cíclopes preguntan qué sucedió, él responde: “¡Nadie me cegó!”
Ante esa absurda declaración, sus amigos piensan que está loco y Odiseo logra escapar con su tripulación.
4. Circe, hermosa y letal hechicera
Muchos de los superhéroes modernos derivan su súper poderes de la magia.
En el universo cinematográfico de Marvel, Fuego Brujo (Witchfire) es una hermosa súper villana y maga del caos.
Por su parte, en los cómics de los X-Men. encontramos a Mystique -alias Raven- otra bella malvada que puede leer las emociones de sus enemigos y manipular las sombras para atacarlos, además de transformarse en cualquier persona.
Pero mucho antes de estos personajes, estaba Circe, la diosa de la brujería más poderosa en la mitología griega.
Circe tenía poderes detransfiguración e ilusionismo, y fue exiliada a una isla mítica con muchas ninfas compañeras.
A través de su profundo conocimiento de pociones y hierbas y el uso de su vara mágica, transformaba a sus enemigos, o a cualquier persona que no le gustaba, en monstruos y animales.
Así fue como transformó a la bella ninfa Escila en una criatura con seis cabezas y doce tentáculos que devoraba a los marineros.
Y cuando Odiseo visitó su isla, Circe no lo pensó dos veces antes de convertir a su tripulación en cerdos.
5. Las amazonas, guerreras implacables
En la mitología griega, las amazonas son una tribu de mujeres guerreras fuertes, hábiles y valientes, que lucharon a la par de los guerreros masculinos.
Las amazonas son la inspiración detrás de la princesa Diana de Temiscira, la Mujer Maravilla de los cómics y las películas.
En primeros relatos originales de la heroína, se dice que fue esculpida del barro por su madre, la reina Hipólita, y dotada con las habilidades y los poderes por los dioses griegos.
Pero en versiones más recientes, la empresa de cómics DC cambió su historia para que ella fuera hija de Zeus.
Así que ahora, en su actual reencarnación, no sólo desciende de una poderosa línea de las amazonas, sino que es una semi-diosa.
6. Eros/Cupido y la dualidad de la identidad secreta
El dios romano Cupido, conocido como Eros para los antiguos griegos, es una de las deidades más reconocibles de la antigüedad clásica.
Todo el mundo lo reconoce como el angelito gordito de alas que con su arco y flechas provocaba el enamoramiento de quien ensartara.
Su imagen en el período clásico de Grecia no era la del regordete con cara de niño (como sale retratado en muchos cuadros alegóricos), sino de un joven delgado y sensual. Su representación comenzó a cambiar en el período helenístico, después del año 323 d.C.
Una cosa que Eros/Cupido tiene en común con muchos superhéroes es su deseo de mantener secreta su identidad. Algunos de los modernos lo hacen con los antifaces o disfraces, como Batman y Spider-Man o, en el caso de Superman, lo único que tiene que hacer es ponerse unas gafas y, listo, se convierte en Clark Kent.
Como muchos de estos héroes famosos, Cupido mantuvo en secreto sus habilidades sobrenaturales (y sus alas) de su propia esposa, Psique.
Siempre salía de casa temprano y cuando regresaba por la noche insistía en que las luces se apagaran antes de entrar en su habitación. Un truco simple pero efectivo.
7. Perseo y el poder de invisibilidad
La invisibilidad es otra de las habilidades básicas de héroes y heroínas, como la Mujer Invisible de los Cuatro Fantásticos.
Como ella, el semidiós Perseo usó la invisibilidad para engañar a Medusa, la monstruosa Gorgona griega de aspecto femenino y cabello de culebras.
Tuvo como misión traer la cabeza de Medusa, una tarea casi imposible ya que la sola mirada de la bestia convertía a la gente en piedra.
Pero se armó con el casco de Hades, que hacía invisibles a quienes lo llevaban, y se acercó a la guarida de Medusa mientras ella dormía.
Mirándola a través del reflejo de su escudo, logró acercarse a ella y cortarle la cabeza.
Y con el casco que lo hizo invisible, escapó de las otras dos gorgonas que lo perseguían (y que él no podía matar porque eran inmortales).
8. Thor y su martillo poderoso
Controlar el clima y las condiciones climáticas y usarlas para ganar la batalla es también un clásico en las historias de héroes.
En la mitología nórdica, Thor es el dios del Trueno, asociado con el estruendo, los rayos, las tormentas, los robles y la fuerza.
Poseía el martillo mágico Mjölnir, que le daba el poder para volar y manipular el tiempo y cumplir su principal objetivo: la protección de la humanidad.
Su homónimo de los cómics Marvel, Thor Odinson, se basa precisamente en esta deidad mitológica nórdica, y sus similitudes no son coincidencia.