ONU. Asamblea general 2018. Maduro está “dispuesto a estrechar la mano” y hablar con Trump

El presidente venezolano destacó que, a pesar de las diferencias con su homólogo estadounidense, tiene la voluntad de “hablar con agenda abierta”.

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El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ratificó este miércoles la “voluntad de diálogo político” con EE.UU., más allá de las diferencias que tiene con su homólogo, Donald Trump.

“Yo estaría dispuesto a estrechar la mano del presidente de EE.UU.”, dijo Maduro durante su discurso ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), tras reiterar que su gobierno “enarbola las banderas del diálogo”.

“¿Tenemos diferencias, Trump? ¡Claro que las tenemos! Pero son los diferentes los que tienen que dialogar”, sostuvo el mandatario venezolano, quien indicó que está dispuesto a hablar “con agenda abierta” sobre los temas que sean considerados por ambas partes.

Más temprano, el inquilino de la Casa Blanca ha instado a otros países a unirse a EE.UU. “en el llamamiento para restablecer la democracia en Venezuela” y ha anunciado que Washington impondrá nuevas sanciones contra “el círculo interno” y “los asesores cercanos” de Maduro.

El mandatario nacional en la ONU aseguró que es “un obrero, no un magnate”, pero a pesar de la diferencias históricas, ideológicas, económicas, sociales y culturales, está dispuesto a dialogar con Trump y olvidar estas diferencias “abismales”.

Asimismo mencionó que “aquellos que son diferentes son los que deben dialogar”.

También felicito a la Organización de las Naciones Unidas y a la doctora y diplomática ecuatoriana María Fernandez Espinoza, por ser la primera mujer en presidir una de las 73 asambleas generales de la ONU.

Finalmente, el Jefe de Estado indicó que Venezuela votará a favor de la resolución que se debatirá en los próximos días en la Organización de las Naciones Unidas que exigirá al gobierno de los Estados Unidos (EEUU) el levantamiento del bloqueo económico y financiero que tiene impuesto a Cuba por más de cinco décadas

Comisión internacional

Durante su intervención, el mandatario venezolano recordó que el pasado 4 de agosto fue víctima de un atentado mientras se encontraba en un acto con el alto mando militar en Caracas y que, tras más de un mes de pesquisas, los implicados han confesado la conexión que tenían con funcionarios de EE.UU., Colombia, México y Chile.

Por esa razón, pidió a la plenaria de Naciones Unidas la designación de un delegado especial de carácter internacional que se encargue de investigar, de manera independiente, las implicaciones y responsabilidades del atentado para “esclarecer la verdad” de los hechos.

El presidente de EE. UU., Donald Trump.

Para el mandatario, los hechos del pasado 4 de agosto en Caracas constituyen la “agresión más grave” que se ha producido Venezuela, debido a sus implicaciones: “Buscaban descabezar el Estado en su conjunto y así justificar una intervención militar“.

Asimismo, indicó que ha dado a conocer al gobierno norteamericano, por vía diplomática, una lista de los señalados como autores intelectuales y financistas del intento de magnicidio para pedir colaboración: “Las investigaciones conducen a que el atentado terrorista se preparó, se financió y se planificó desde el territorio de EE.UU.”, recalcó.

“Más fuerte que nunca”

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Maduro sostuvo que su país ha sido víctima en los últimos años de un intenso asedio de carácter “económico, político, diplomático y mediático”, que no solo busca un cambio de gobierno por vía violenta sino la apropiación de los ingentes recursos naturales que posee Venezuela.

Entre los recursos naturales más importantes que posee el país suramericano, el mandatario enumeró la reserva petrolera más grande del mundo, la cuarta de gas y la riqueza aurífera que, tras su proceso de certificación, podría convertirse en la primera a escala global. Para el mandatario venezolano, esa potencialidad “ha llevado a las oligarquías del continente a plantearse la dominación del poder político“.

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El asedio económico, explicó el mandatario, tiene que ver con la aplicación de medidas coercitivas unilaterales por parte de EE.UU. para generar unas condiciones de bloqueo que le han impedido a Venezuela hacer operaciones en dólares y disponer de sus recursos.

En lo mediático, Maduro denunció que se ha tratado de “construir un expediente para justificar una intervención militar” con el argumento de una “crisis migratoria”, cuando se tiene una política de “doble rasero” que ignora las oleadas migratorias provocadas por las “agresiones de la OTAN” en Oriente Medio o no se muestra la gravedad de la situación humanitaria en la frontera entre EE.UU. y México.

En el ámbito diplomático, Maduro citó como ejemplo las “amenazas directas de recorte de ayudas” por parte de EE.UU. a países que requieren financiamiento, con el argumento de que solo ayudarán a las naciones que respondan a los intereses de Washington, una política que ha sido tildada por el mandatario venezolano como una “extorsión”.

“Sobre Venezuela se ha dirigido una feroz arremetida, apoyada por los gobiernos satélites que, arrodillados, mancillan el honor de los pueblos que dicen representar”, expresó el jefe de Estado venezolano.

No obstante, Maduro destacó que pesar de las agresiones y el asedio en múltiples frentes, su país está “más fuerte que nunca“. “Hoy, le digo al mundo que Venezuela mantiene su dignidad. Hemos sacado fuerzas de nuestras entrañas históricas para estar de pie”, finalizó.

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