‘Instapoetas’, el nuevo fenómeno literario
Carlos Salem, Escandar Algeet, Marwan, Loreto Sesma, Irene X, Victoria Ash, Elvira Sastre, Diego Ojeda, Ajo o Rayden forman parte de la larga lista de jóvenes autores que se han abierto paso en el panorama poético español a través de internet y el boca a boca. La receta del éxito combina un lenguaje fresco, directo y transgresor que derriba viejos tabúes con la habilidad en el uso de las nuevas tecnologías y las redes sociales.
Un lenguaje fresco, directo y transgresor que derriba viejos tabúes
El resultado de esta fórmula es una legión de seguidores que ha llegado a traspasar, en muchos casos, la barrera digital de YouTube, Instagram, Facebook y Twitter para volver al soporte tradicional: el papel. Un nuevo filón que ha empezado a explotar el gremio editorial, que ha visto una oportunidad de negocio en los miles de ‘likes’ que estos jóvenes son capaces de conseguir en sus publicaciones.
Hay diversidad de opiniones entre los expertos de si se trata de un nuevo movimiento literario –que algunos han bautizado como “nueva poesía”- o si es tan sólo una consecuencia de la facilidad de difusión que brindan las redes sociales. El catedrático de Literatura Hispanoamericana de la Universidad de Navarra, Javier de Navascués, sostiene que estos jóvenes “se han dado cuenta de las posibilidades del entorno digital y, sencillamente, se han lanzado y han tenido suerte”, al tiempo que desvincula el fenómeno de tendencias literarias al estilo de la Generación del 27, que supuso un revulsivo para el género.
Casi un siglo después, la poesía vuelve a estar de moda, a juzgar por el aumento de nuevos poetas que acuden a los certámenes, recitales y encuentros que organizan colectivos como la Asociación Española de Amigos de la Poesía (ASEAPO), fundada en 1989. La presidenta de la entidad , Rosa Rodríguez Núñez, considera el fenómeno “una nueva generación en el sentido amplio de la palabra”.
“Tienen gran calidad literaria y, a través de recitales, redes y autoedición están consiguiendo atraer a gente joven a espacios donde ellos se desenvuelven perfectamente -bares, locales bohemios, espacios municipales…-“, comenta la representante de esta asociación ubicada en el madrileño municipio de Móstoles. No obstante, admite el peligro de que la red dé difusión y popularidad a autores a los que les falta “mucha formación”, y en este sentido añade: “Una cosa es ser transgresor y otra cosa no saber lo que es poesía”.
El cantautor y poeta Marwan
Marwan, el cantautor poeta “Lo que hacemos no es nuevo, sino el haber llegado al gran público y conseguir tener muchos seguidores”, señala Marwan (Madrid, 1979). El poeta y cantautor de reputada trayectoria, que ha compartido cartel con artistas de la talla de Ana Belén, Víctor Manuel, Ismael Serrano, Fito Páez o María Dolores Pradera, es uno de los nombres más destacados de esta nueva tendencia poética. Además de publicar varios discos, Marwan ha escrito cinco libros de poesía.
En su último poemario, Los amores imparables (Planeta), aborda temas universales –como el amor y el desamor-, pero también otras cuestiones como el maltrato, España o la dictadura. El autor está convencido de que la clave de su éxito es haber “sabido transmitir una cierta cercanía y hablar de emociones profundas de un modo profundamente sencillo”, y asevera: “Tengo capacidad de crear empatía y convertir lo que es personal en un sentimiento universal”.
No obstante, rechaza que se le cuelgue la etiqueta de haber sido el iniciador de esta corriente nacida al calor de internet, un mérito que atribuye a Carlos Salem y Escandar Algeet. Asimismo, reconoce que muchos de sus micropoemas tienen su origen en tuits que ha publicado, lo que no implica que no haya habido un periodo de reflexión y elaboración del texto, una crítica que a menudo reciben los ‘instapoetas’.
Marwan reflexiona sobre el origen de esta corriente poética: “Hoy en día la gente pasa tanto tiempo en redes sociales que su capacidad para prestar atención a textos y música se ve reducida drásticamente por su costumbre de saltar de titular en titular, de tuit en tuit o de publicación en publicación”. Un gusto por lo corto y breve que, según él, “encaja mucho” con la filosofía de la poesía.
Lo cierto es que el poema corto o micropoema –como el haiku japonés- vuelve a vivir una época de esplendor gracias a las redes sociales y a aplicaciones móviles de mensajería instantáneos como Whatsapp. La poeta Glòria Calafell, exprofesora de lengua y literatura hispánica y catalana, define que el micropoema “es la impresión para hablar de un instante”. “La concisión es importantísima y, para ello, hay que buscar la palabra exacta porque, si no, este pequeño poema o cuento no tiene sentido”, asevera.
Loreto Sesma, periodista y poetisa
“Cuando me viene un poema a la mente, abro las notas del móvil y lo escribo”, explica la periodista y poetisa Loreto Sesma, que con tan sólo 22 años ha publicado cuatro poemarios y se ha convertido en un referente comobooktuber -el término con el que se denomina a los creadores de contenidos para YouTube-. Y a pesar de ser en esta famosa plataforma de vídeos de internet donde más destaca, su perfil de Instagram, en el que cuelga fotos posando, también cuenta con miles de seguidores.
“Cuando gané el XXXIX Premio Internacional de Poesía ‘Ciudad de Melilla’, leí un tuit de un señor que decía: ‘sí, mucha cara de poeta tiene y, encima, aparece [en internet] semidesnuda’. En el 2018 todavía no hemos avanzado nada. ¿qué cara tiene que tener un poeta o una poetisa?”, pregunta Sesma. La zaragozana también ha saltado al papel couché por su relación con Willy Bárcenas, cantante de Taburete e hijo del extesorero del PP Luis Bárcenas.
La trayectoria de la autora de poemarios como Alzar el duelo(Visor, 2018) y Amor revolver (Espasa, 2016) empezó a escribir en un blog que enseñaba sólo a sus amigos. Después de descubrir el videopoema ‘Co-razones’ del palentino Escandar Algeet, otro de los autores más destacados del fenómeno, se lanzó a recitar y grabar vídeos de poesía para la plataforma, donde cuenta en la actualidad con más de 170.000 seguidores.
A partir de entonces, varias editoriales se interesaron por publicar los poemas de Sesma, cuyas influencias literarias son Mario Benedetti, Pablo Neruda, Ángel González y autores de su propia generación, como Irene G. Punto, a quien considera su primera lectora. La poeta ha conquistado el corazón de miles de lectores con una lírica delicada y, a la vez, desgarradora que habla de amor y desamor, pero también de sus propias debilidades e inseguridades.
La poesía rebelde y feminista de Irene X
“Antes a las mujeres nos daba más vergüenza expresarnos; había un tabú sobre nosotras, que se está cayendo”, señala la ganadora del I Premio Espasa es Poesía, Irene Domingo Longares –Irene X- (Zaragoza, 1990), que con su estilo directo y rebelde abandera la poesía feminista contemporánea. Sus primeras andanzas en esta expresión artística empezaron en la adolescencia, cuando navegando por internet se topó con foros de poetas amateurs.
Más tarde, publicó su primer libro y se sorprendió de que en tan sólo dos semanas se agotaran todos los ejemplares de la primera edición –compuesta por unas 1.000 unidades-. Hasta el momento ha publicado seis poemarios, entre el que se encuentra La chica no olvida, ganador del certamen poético de Espasa. De Irene X, el jurado destacó “su capacidad de suscitar temas de actualidad, escribiendo desde la frontera de la denuncia y de reivindicación de los humillados y ofendidos de nuestro siglo”.
“Yo leía a Baudelaire a los 15 años, pero muchas niñas de esa edad no lo harán, por lo que hay que hacerles la poesía más accesible”, defiende la autora, que en su blog y en Instagram acompaña sus micropoemas con evocadoras imágenes, en algunas de las cuales aparece exhibiendo sus característicos tatuajes. “Soy un poco mi propio cuaderno; casi todo lo que me va pasando, en palabras o pequeñas imágenes, lo llevo encima”, cuenta a La Vanguardia.
Como Irene X, la poeta Glòria Calafell constata que en esta nueva generación está surgiendo mucha poesía en femenino. “La mujer tiene muchas cosas que explicar desde que trabaja y se ha separado; ha roto con muchos tabúes y tiene la necesidad vital de explicarlo”, dilucida la experta en literatura hispánica y catalana, que a su vez sostiene que las mujeres también están proliferando en la poesía escrita en otras lenguas, como la catalana, en la que destacan nombres como Susanna Rafart, Mireia Calafell, Dolors Miquel, Laia Carbonell, Marta Pérez i Sierra o Montse Assens.
¿Falta de calidad literaria?
Al igual que otras de las autoras consultadas, la poeta ve positivo el éxito de los ‘instapoetas’ en el sentido de que puede contribuir a introducir al gran público en el género poético. Sin embargo, el catedrático Javier de Navascués plantea sus dudas al respecto, y afirma que, “aunque no se trata de invalidar todo lo que salga de este fenómeno”, para él es “capitalismo” en “versión poética”.
Aún así, no descarta que en este contexto puedan aparecer poetas que evolucionen a “hacer cosas interesantes”, al tiempo que recuerda que “la buena literatura no siempre tiene que estar reñida con el mercado”, como demuestra el hecho de que Lope de Vega fuera “un autor best seller nato en el siglo XVII”.
Lo cierto es que, a pesar de sus debilidades y fortalezas, para cada uno de los poetas que están naciendo de esta nueva generación la poesía tiene un significado diferente y puede llegar a emocionar a todos los públicos.
El fenómeno cuenta con una larga lista de mujeres poetas en cuyos poemas se puede apreciar la impronta feminista