ROLAND GARROS 2.019. Semifinales. Nadal-Federer. Konta vs. Vondrousova. Dobles: Cabal-Farah vs. Chardy-Fabrice y Krawietz/Mies vs Pella /Schwartzman
En su actuación más regular, con apenas un par de altibajos y una interrupción de más de una hora por culpa de una rápida tormenta, Rafa Nadal tronó y se merendó a Kei Nishikori (6-1, 6-1 y 6-3 en 1h:51) en ruta hasta su duodécima semifinal en Roland Garros. Y ya se sabe lo que pasó después de las once anteriores, que el español levantó la Copa de los Mosqueteros. Nadie ha llegado tan lejos tantas veces como él.
Pero en esta ocasión tendrá enfrente al rival de los rivales, Roger Federer, que ganó con épica a su compatriota Stan Wawrinka (7-6 (4), 4-6, 7-6 (5) y 6-4 en 3h:35).
Será como en 2005, cuando Rafa venció al ganador del 20 Grand Slams el día de su cumpleaños y se enfrentarán en tierra (13-2, 5-0 en París para el balear) seis años, dos semanas y cinco días después de su duelo en la final de Roma 2013.
La británica dominó con sorprendente facilidad a Sloane Stephens (6-1 y 6-4), finalista el año pasado, y se enfrentará el jueves a Vondrousova, que dejó fuera a Martic (7-6 y 7-5).
En un torneo que hasta este año se le daba muy mal (nunca había pasado de la primera ronda). Johanna Konta sigue haciendo historia para el tenis británico.Este martes ha ganado con una facilidad sorprendente (6-1 y 6-4 en 71 minutos) a Sloane Stephens, finalista el año pasado que eliminó a Muguruza en octavos, y es la primera jugadora de su país que llega a las semifinales de Roland Garros desde Jo Durie en 1983.
Konta (28 años y 26 del mundo), tenía hasta ahora como mejor resultado las semifinales de Australia en 2016 y las de Wimbledon en 2017. Sólo ha ganado tres títulos (el más importante en Miami hace dos años). Y se ha plantado en la penúltima ronda con un solo set perdido. Ante Stephens aseguró mucho sus saques (86% de puntos ganados con primeros) y cometió 13 errores no forzados, muy pocos. Además, solo concedió una bola de quiebre a su rival y la salvó, mucho mérito. Ahora espera rival (Vondrousova o Konta) soñando con ser la primera británica que juega la final en París desde Sue Barker, campeona en 1976.