Tour de France. Etapa 6a. Los colombianos Bernal, Chaves, Quintana, López y Urán a 13 segundos de la amarilla
Los ciclistas colombianos se mantienen firmes en la pelea por la camiseta amarilla, como pasó este jueves en la etapa 6, que tuvo como ganador a Alexey Lutsenko, compañero de Miguel Ángel López en el Astana.
La carrera invitó a los favoritos a medirse en la montaña, pues el tramo final era en alto, pero en esta ocasión, el pelotón decidió resguardarse, dejando que los rezagados hicieran lo suyo.
Fue así como cada equipo buscó colocar gregarios en el ataque, empezando por el Astana, pues la primera fuga de ocho ciclistas, dejó como ciclistas más fuertes a Lutsenko, quien mantuvo su diferencia con su primer perseguidor, Jesús Herrada.
Aunque el kazajo pudo ser el conector de ‘Superman’ López, él quedó con el resto del equipo en el pelotón, que apenas tuvo acción en el último kilómetro, con Julian Alaphilippe animándose a escapar, pero no le alcanzó para descontar.
De esta manera, Adam Yates mantuvo la camiseta amarilla por otro día más, seguido de Primoz Roglic, del Jumbo Visma, a tres segundos y Tadej Pogacar, del UAE Emirates, a seis segundos.
Los mejores colombianos son Egan Bernal, Nairo Quintana, Esteban Chaves y Miguel Ángel López, en el Top 10, a 13 segundos, que es el mismo tiempo de Rigoberto Urán en la posición 14.
Mañana la etapa arranca con montaña pero termina en terreno plano, con 168 kilómetros entre Millaur y Lavaur, donde habrá un puerto de cuarta categoría, dos de tercera y un sprint intermedio.
Etapa 7. Llana – 168 km (viernes, 4 de septiembre)
Etapa trampa al final de la primera semana con un recorrido enrevesado que someterá al pelotón a vientos cambiantes y que debería terminar con victoria a la fuga o al esprint. Salida en Millau y la primera pugna entre velocistas será en el punto intermedio de Saint-Sernin-sur-Rance, en el kilómetro 58. El Col de Peyronnec, de tercera (14,5 km al 3,9%) y la Cote de Paulhe (cuarta pero rampa dura de 1,1 km al 7%) emergen antes de terreno llano hasta la meta de Lavaur.
Etapa 8. Montaña – 141 km (sábado, 5 de septiembre)
El Tour llega a los Pirineos con un encadenado de dos primeras y un especial. Se partirá de Cazères-sur-Garonne y se llegará a Loudenvielle. Esprint intermedio en Sengouagnet, kilómetro 42, antes de afrontar el Col de Menté, de primera (6,9 km al 8,1%), el Port de Balès, especial (11,7 km al 7,7%) y el Peyresourde, de primera (9,7 km al 7,8%). En su cima, a 12 km de meta, habrá bonificaciones.
Etapa 9. Montaña – 153 km (domingo, 6 de septiembre)
Otro bocado de los Pirineos y otro encadenado con dos primeras. Salida en Pau, paso por el Col d’Artiguelouve (cuarta, 2,3 km al 4,5%), paso por el Col de la Hourcère (primera muy intenso, 11,1 km al 8,8%), inmediatamente después el Col de Soudet (tercera, 3,8 km al 8,5%), esprint intermedio en Arette (km 99), otro tercera, el Col d’Ichère (4,2 km al 7%) y un pequeño valle antes del Col de Marie Blanque, el primera que cierra la serie (7,7 km al 8,6%). Un pequeño llano pica hacia arriba hasta la llegada a Laruns.
Descanso (lunes, 7 de septiembre)
Etapa 10. Llana- 168,5 km (martes, 8 de septiembre)
Tras los Pirineos, rumbo oeste con una etapa que sale de Île d’Oléron Le Château-d’Oléron y desemboca en Île de Ré Saint-Martin-de-Ré. Una ruta costera que conectará dos islas y visitará varios diseños de fortificaciones del ingeniero Vauban en la región de Nueva Aquitania. La llegada debería ser para velocistas, pero el viento del litoral acechará al pelotón y podría provocar alguna fuga interesante. Esprint intermedio en Chatelaillon-Plage (km 129,5).
Etapa 11. Llana – 167,5 km (miércoles, 9 de septiembre)
Última jornada de tregua antes de la llegada de la montaña. Recorrido prácticamente llano y sin dificultades montañosas a excepción de la pequeña cota de Cherveux, de 4ª categoría, en torno a la mitad de la etapa. El triunfo, salvo sorpresa mayúscula y relajación del pelotón ante las etapas venideras, debería resolverse en un esprint masivo.
Etapa 12. Media montaña – 218 km (jueves, 10 de septiembre)
Etapa propicia para las fugas, con un terreno rompepiernas de 218 km entre las localidades de Chauvigny y Sarran. Habrá cuatro ascensiones, siendo la última de ellas la más dura: el Suc au May, de 2ª categoría. Se corona a 26 km de meta y quien tenga fuerzas podrá probarlo en solitario ya que los repechos de los últimos compases favorecen a los fugados con respecto a grupos numerosos.
Etapa 13. Montaña – 191,5 km (viernes, 11 de septiembre)
Llegó la hora de la verdad. Primera etapa de montaña en este Tour, donde los favoritos de la general deberán mostrarse en la disputa por el triunfo parcial, o al menos, para sacar tiempo al resto de sus rivales en la última ascensión. En total, siete puertos que destrozarán la carrera en mil pedazos casi desde la salida, con el Puy Mari decidiendo el triunfo en sus 5,4 km al 8,1%. Jornada ideal para los escaladores puros.
Etapa 14. Media montaña – 194 km (sábado, 12 de septiembre)
Sin descanso tras la paliza del día anterior con otros 194 km. Eso sí, esta vez sin ningún puerto de excesiva entidad. Se espera que los favoritos se tomen el día con más calma para recuperar fuerzas y sean los hombres de fuga quienes se jueguen la victoria. La Cote de la Croix-Rousse, a 5 km de la llegada, ideal para que corredores explosivos saquen valiosos segundos.
Etapa 15. Montaña – 174,5 km (domingo, 13 de septiembre)
Los corredores partirán de Lyon en una jornada cuyos 100 primeros kilómetros serán llanos. Pero el final es de traca, con tres puertos casi encadenados de la más alta exigencia: Montée de la Selle de Fromentel (1ª), Col de la Biche (1ª) y el Grand Colombier (Hors Categorie). Sus 17,4 km al 7,1% de pendiente media serán totalmente decisivos en el devenir de la carrera, ya que más de un favorito dirá adiós a sus opciones.
Descanso (lunes, 14 de septiembre)
Etapa 16. Montaña – 164 km (martes, 15 de septiembre)
Tras la segunda y última jornada de descanso de este Tour, comienza el tramo más decisivo de la presente edición. El día se resolverá en las dos últimas ascensiones (de un total de cinco), con el Montée de Saint-Nizier-du-Moucherotte (1ª categoría) como más decisiva. Tras coronar, los corredores afrontarán un leve descenso hasta Villard de Lans, donde se resolverá el triunfo entre los corredores que posean un potente cambio de ritmo, ya que sus rampas no son de gran dureza.
Etapa 17. Montaña – 170 km (miércoles, 16 de septiembre)
Sólo dos puertos en esta etapa de 170 km entre Grenoble y Méribel. Pero vaya dos puertos, ambos Hors Categorie. Se trata del clásico Col de la Madeleine (17 km al 8,4%) y del tremendo Col de la Loze (21,5 km al 7,8%). Día importantísimo que podría marcar el desenlace de la carrera, ya que se pueden ganar o perder auténticas minutadas en estos dos colosos. Además, la etapa concluye a 2.304 metros de altitud, donde solo los más fuertes sacarán ventaja.
Etapa 18. Montaña – 175 km (jueves, 17 de septiembre)
No hay dos sin tres, y está tercera jornada montañosa consecutiva causará estragos en el pelotón. Cinco puertos encadenados, sin kilómetros llanos entre ellos, componen la mayor parte del recorrido, con el Montée du plateau des Glieres como plato fuerte a menos de 40 km de meta: 6 km al 11,2%. Sus rampas son brutales, por lo que apenas un reducido grupo de elegidos se jugará la victoria en el descenso del Col des Fleuries, que no es considerado puerto para la organización del Tour.
Etapa 19. Llana – 166,5 km (viernes, 18 de septiembre)
Pequeño impás en el camino con esta etapa llana, más bien corta, de 166 kilómetros entre Bourg-en-Bresse y Champagnole. Habrá bastantes repechos a lo largo de la ruta, que a estas alturas de Tour pesarán en las piernas, pero el triunfo debería resolverse al esprint entre los velocistas del pelotón.
Etapa 20. Contrarreloj individual – 36,2 km (sábado, 19 de septiembre)
La última bala en la recámara, si es que la carrera no llega decidida a este punto, con la contrarreloj individual a La Planche des Belles Filles. No se trata de una contrarreloj individual al uso, ni tampoco cronoescalada. Serán unos 30 kilómetros llanos, ideal para rodadores, con los 6 últimos de ascensión a La Planche y su desnivel medio del 8,5%. Será fundamental calcular el esfuerzo en el tramo llano para no reventar en el puerto.
Etapa 21. Llana – 122 (domingo, 20 de septiembre)
La tradicional llegada a los Campos Elíseos, con el clásico circuito por París, donde la gloria le estará reservada al ganador del Tour de Francia 2020. Como es costumbre, día para que los velocistas pongan el broche de oro a la carrera.