Afiche oficial:
Ya hay afiche oficial de los 400 años de Bucaramanga, que se celebrarán el próximo 22 de diciembre.
La ilustración fue hecha por Eduard Camacho, estudiante de Artes Plásticas de la UIS
El concurso por los 400 años
Para llegar a descubrir la imagen ganadora se realizó un concurso se incentivos, liderado por el Instituto Municipal de Cultura y Turismo, para citar a todos los artistas que lo desearan a plasmar su representación de Bucaramanga.
99 propuestas llegaron. Todas fueron evaluadas en un primer instante de acuerdo a las bases del concurso para finalmente elegir las 10 que mejor representarán lo requerido en la convocatoria.
El jurado y el público
A partir de allí, se abrió la votación al público de manera virtual y se citaron a tres expertos en los tres campos más acordes a la naturaleza del concurso (el arte, la historia y la publicidad) para elegir la ganadora.
Para ello se invitó a un jurado de primer nivel:
- Beatriz González, una de las artistas colombianas más reconocidas a nivel mundial y probablemente la principal figura reconocida del arte de Bucaramanga.
- Armando Martínez Garnica, historiador, profesor emérito de la UIS y autor de 32 libros -varios de ellos dedicados a la ciudad.
- Juan Guillermo Vargas Harker, uno de los bumangueses más destacados en el ámbito del márketing y la innovación. (Si quieres conocer a fondo los jurados, dale clic aquí).
Por otra parte, en menos de 25 días llegaron a la página web de los 400 años más de 22 mil votos para elegir el favorito de los internautas.
Con esteos resultados, más el debate de los tres jurados, se llegó a la decisión sobre el ganador.
El ganador del afiche 400 años
La obra ganadora se denomina Panoramica Bucaramanga Popular. Es una creación de Ed Camacho, estudiante de Artes Plásticas de la UIS. Conoce a continuación la imagen y más abajo, algo más de su autor.
El artista relata que desde que decidió participar en el concurso tuvo clara la idea: “Quería que todas las comunas de Bucaramanga se vieran representadas. Sitios, locaciones puntuales y ubicaciones emblemáticas, que pueden no ser tan famosas para el visitante, pero que las conocen bien la gente de aquí”.
Su punto de partida fue el ave, conocida en la ciudad como tortolita, que es muy habitual en los parques de la ciudad y que, para él, le traen recuerdos de su infancia disfrutando de Bucaramanga. «Desde allí empecé a armar la pieza. Para ello, estudié bastante, recorrí de nuevo toda la ciudad».