USA. Los Proud Boys y otros grupos ultras abandonan a Donald Trump: “Es débil”
Los radicales se sienten “traicionados”. Ahora se teme que se vuelvan más peligrosos
Esperaban algo así como el ‘Día del Juicio Final’. Con el cielo negro cerniéndose sobre Washington, un regusto a guerra civil en al aire y un presidente dispuesto a atrincherarse en la Casa Blanca y a declarar la ley marcial.
Pero al final fue un día de espléndido: sol invernal, en una ciudad blindada frente al enemigo invisible y con un Donald Trump abatido en la traca final.
Menudo fiasco. Trump, el presidente que alentó la ocupación del Capitolio, hacía mutis por el foro y se iba a su mansión de Mar-a-Lago, que ha perdido el rango de Casa Blanca de invierno.
Biden es el presidente número 46 de Estados Unidos y no se ha producido el fin del mundo, cosa que no preveían los sectarios, ahora muy confundidos.
Otros están rabiosos. Los Proud Boys, uno de los grupos supremacistas que más se han significado con la causa del expresidente, que con más lealtad se entregaron a cambiar el resultado de las urnas, han pasado página.
“Hail emperador Trump”, le saludaban entonces en Telegram. Esta semana, en el mismo canal, el tono era radicalmente el opuesto. “Trump quedará como un fracaso total”, indicaron. Una vez que se marchó de Washington, otras conversaciones en la citada plataforma o en Gab calificaron a Trump de “cómplice” del establishment y de ser “extraordinariamente débil”.
Los Proud Boys, que aceptan solo a hombres, es uno de las organizaciones racistas que más ha difundido la violencia política en nombre del expresidente. Enrique Tarrio, uno de sus jefes, se ofreció a servir como una milicia privada después de oír en el primer debate que Trump les dijo “retroceded y estad a la espera”.
Su descontento se empezó a manifestar cuando el todavía presidente condenó la violencia de la insurgencia del 6 de enero.
La cólera hacia Trump ha subido con sus últimas decisiones. Concedió 144 perdones y conmutaciones de penas, muchos a considerados corruptos de la ciénaga que el expresidente prometió limpiar, mientras que no ha hecho nada por ayudar a los protagonistas de la toma del Capitolio.
En lugar del “gran despertar” que esperaban los de QAnon, el FBI detuvo este miércoles a Joseph Biggs, de 37 años y uno de los destacados Proud Boys. Le imputan ser uno de los cabecillas del asalto mortal al Congreso. Al menos otros cuatro miembros del grupo están imputados.